Mi María Salada

No llames a esta sirena "pequeña"; llámala "capitana", a menos que quieras caminar por la tabla.

Mary está enamorada del supuesto príncipe de Charles Town, pero él no la ama, lo cual es un inconveniente. Como ella es una sirena, si le rompen el corazón, ¡zas!, se convertirá en espuma de mar.

Pero, en lugar de eso, Mary se encuentra fuera del mar y se sube a un barco pirata. Para sobrevivir, se une a ellos. Pero Mary no está dispuesta a cantar los yo-ho-hos. Quiere la vida pirata, toda ella, y está lista para causar sensación... convirtiéndose en capitana. Pero cuando Barbanegra muere repentinamente, Mary tiene la oportunidad de convertirse en mucho más: Rey Pirata... o Reina.

Ella no dejará que nadie la detenga: ni el lindo hijo de Barbanegra, ni su mejor amigo del fondo del mar que se está divirtiendo demasiado con sus nuevas piernas, y ciertamente no todos los que dicen que no puede ser pirata solo porque es una niña.

Puede que no sea el mejor hombre para el trabajo, pero definitivamente demostrará que vale la pena.